Solo hay que echar una mirada cortoplacista hacia el pasado para observar que España, en concreto, y Europa, en general, se encuentran en proceso de digitalización. Las constantes transformaciones en la sociedad de la información también se han hecho visibles en las administraciones públicas. Aunque todavía hay retos por superar.
“Cada vez más personas, empresas y servicios públicos se están digitalizando. Pero todavía son demasiados los que se enfrentan a problemas tales como una falta de cobertura de Internet de alta velocidad o una administración electrónica transfronteriza”, afirma el vicepresidente responsable del Mercado Único Digital, Andrus Ansip.
Europa reconoce que sus Estados miembros han realizado grandes progresos en aspectos como la conectividad y las competencias digitales, así como en los servicios públicos, según recoge el Índice de la Economía y la Sociedad Digitales (DESI, en inglés) de 2016. No obstante el ritmo se ha ralentizado en 2015, con una puntuación de 0,52 sobre 1, lo que supone un incremento del 0,02 respecto 2014. Los países escandinavos –con Dinamarca, Suecia y Finlandia a la cabeza- siguen ocupando los primeros puestos de DESI. España ocupa el puesto número 15 de los 28 miembros.
Los retos de Europa
El estudio compara por primera vez la situación europea con los países más digitalizados del mundo, como Japón o EE.UU. Aunque los países más punteros de la UE poco tienen que envidiar a los otros, la Comisión Europea considera que todavía hay grandes retos a los que enfrentarse:
Conectividad: Ha mejorado, pero no lo necesario. En la actualidad, el 71% de los hogares de la UE tiene acceso a banda ancha de alta velocidad, frente al 62% del pasado año. Se espera llegar al 100% en 2020. El objetivo ahora es la rápida adaptación a las redes de comunicación 5G.
Competencias digitales: Cerca del 45% de los europeos no tiene los conocimientos informáticos básicos, como utilizar el correo electrónico o instalar nuevos dispositivos. Para ello, la UE incluirá en su agenda el abordar la cuestión de las competencias y la formación digital.
Comercio electrónico: Este es el gran reto de las pequeñas empresas. El 65% de los usuarios europeos compran en Internet, aunque solo el 16% de las pymes venden online –y la mitad de ellas lo hacen fuera de su país-. En mayo de este año, la UE presentará un paquete de leyes como la inclusión de medidas que aborden “la cuestión del bloqueo geográfico injustificado, mejorar la transparencia de los mercados transfronterizos de paquetería y hacer cumplir mejor las normas de la UE en materia de protección transfronteriza de los consumidores”.
Servicios públicos infrautilizados: El informe DESI también recoge que cada vez hay más servicios públicos online, pero no son demandados. Tan solo un 32% de las internautas utiliza las herramientas digitales que ofrecen las administraciones públicas.
Más allá de la crisis económica, Europa afronta un gran reto: convertirse en el continente puntero del escenario digital mundial. Para ello, ya se ha puesto los deberes de 2016.
Miguel Mirón
Consultor